Las cuadrillas de música tradicional de la huerta de Murcia sufrieron un importante declive entorno a los años 60 y 70 del pasado siglo XX. A consecuencia de una emigración a otros países europeos (Francia, Alemania) y por la llegada de un “nuevo tiempo” repleto de cambios sociales, económicos. Todo ello provocó que aquellos rituales, grupos festivos o acontecimientos religiosos entorno a las cuadrillas de ánimas o campanas de auroros (despiertas, misas, carreras de aguilando) perdiera presencia social en territorio huertano.
El paso del tiempo nos ha dado una nueva generación de cuadriller@s, músicos, cantaores y bailaores con formaciones y ocupaciones profesionales muy variadas, con conocimientos musicales, de corte popular y profesional, amantes de la música de raíz e interpretes de unos estilos musicales transmitidos y/o recuperados generación tras generación.
Emilio del Carmelo Tomás Loba es uno de esos cuadrilleros que a lo largo de tres décadas viene trabajando por la música de tradición oral y el patrimonio de nuestra Región. Formó parte de varias agrupaciones folklóricas, de la Cuadrilla de Patiño (en la que desempeñó un importante trabajo de investigación) y la Cuadrilla Mediterránea de la Asociación Etnomurcia.
En la Hermandad de las Benditas Ánimas de Patiño contamos en artículos anteriores la presencia de importantes cantaores y bailaores, en esta ocasión mencionamos a la saga de los Nicolás Fructuoso formada por la voz y pandereta de Miguel Ángel Nicolás y el guitarro tenor de su hermano Alejandro Nicolás. Otro de los músicos importantes de esta nueva generación de cuadrilleros es la de José Antonio García Gallego, voz de la aurora e interprete de jotas y malagueñas, siendo el repiqueteo de su guitarro de 6 cuerdas una seña de identidad de la Cuadrilla patiñera en los últimos tiempos.
Desde la Cuadrilla de Torreagüera igualmente destacamos la presencia de viejos cuadrilleros pertenecientes a generaciones anteriores. En nuestros días la agrupación se ha renovado con nuevos músicos y bailaores, mostrando en su repertorio importantes piezas. Las figuras de José López Espín, Alberto Hidalgo Pérez, junto a las voces femeninas de Ángeles Nicolás y Josefa Cano (entre otras componentes), constituyen sin duda alguna un importante relevo y eje central para la transmisión de los sonidos de la Huerta y el Campo a través de sus eventos culturales, publicaciones discográficas y participación en rituales.
Desde la localidad de Beniel la figura de Antonio Moratón Álvarez con el acompañamiento de guitarra española y los trabajos de campo realizados en los años 90, el violín de Carmen Costa García y la voz de Belén Sánchez Gascón, representan junto a la de otros compañeros de esta agrupación, un eje fundamental de trabajo, renovación y transmisión para lo que es hoy en día esta Cuadrilla.
Finalmente la Cuadrilla de La Arboleja – Albatalía reaparecía hace unos años con la publicación del trabajo “desde la huerta de Murcia“. Nuevos músicos y componentes encargados de dar vida a los sonidos de jotas, malagueñas y aguilandos apagados con el paso del tiempo. La voz y el violín de José Francisco Pascual, el golpe de guitarra de Pedro Jesús López o la voz de Arturo Ramallo, representan en nuestros días la nueva generación de cuadrilleros, los cuales en las últimas décadas han venido trabajando por la defensa y lucha de un patrimonio sonoro llegado a nosotros.
Tomás García Martínez / documentalista.
@huertano21
31 de agosto de 2018
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